Yolanda y su mamá recibieron a mis padres muy bien. Atenta en todo momento de lo que necesitaran.
El lugar es pequeño pero muy bonito y limpio, lo suficientemente alejado del centro para descansar, pero caminable a cualquier lugar.
Nos encantó ¡gracias!

Nos sentimos como en casa en el alojamiento. Los desayunos caseros ricos y tradicionales hasta las pláticas con la mamá de Frida. Buena ubicación a 4 cuadras caminando del templo de Santo Domingo y justo en el camino a pie al auditorio de la Guelaguetza

Todo estuvo muy bien. Desde la ubicación, la estancia agradable y sin ruidos.
Yolanda , su mamá y el personal de servicio fueron muy agradables y nos ayudaron a tener una buen hospedaje de principio a fin.

Muy buena atención y desayunos muy ricos.